El encuentro empresarial #QuieroCorredor nos recuerda que apostar por el Mediterráneo es apostar por el conjunto del país.
Con el hashtag #QuieroCorredor, la plataforma civil para el Corredor Mediterráneo celebró su sexta reunión masiva en Barcelona el pasado 17 de noviembre en la que hizo balance y reivindicó la aceleración y desbloqueo de distintas obras que están en curso para conseguir su pleno funcionamiento. Con la asistencia de más de 1.500 empresarios reunidos bajo el lema “Nuestro país no puede esperar más” se denunciaron los más de 20 años de retrasos en las obras.
Abrió el acto el presidente de la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), Vicente Boluda; y contó con las intervenciones destacadas de la ministra de Transportes, Raquel Sánchez; de la directora del Barcelona School of Economics, Teresa Garcia-Milà; y del expolítico y prestigioso abogado Miquel Roca. Entre los asistentes, el presidente catalán, Pere Aragonès; el valenciano, Ximo Puig, y el murciano, Fernando López Miras. Y destacados representantes del mundo económico, como el presidente de Mercadona, Juan Roig; el presidente del Cercle d’Economia, Jaume Guardiola; y miembros de las patronales, como Antonio Garamendi, de la CEOE, y Josep Sánchez Llibre, de Foment del Treball, entre otros. Ante todos ellos, desde la organización, Vicente Boluda, resumió los objetivos que este movimiento empresarial ha conseguido para llevar el Corredor a término: unidad, compromiso político, y orden técnico para la consecución del calendario.
El Corredor Mediterráneo forma parte de la red transeuropea de transporte para la mejora de la competitividad de las exportaciones que ha de captar gran parte del tráfico de mercancías entre Asia y Europa, y ha de facilitar a la vez la movilidad de pasajeros rápida, segura y sostenible. La apuesta para la ejecución del Corredor tomó forma definitiva con la aprobación del Mecanismo “Conectar Europa” (reglamento 1153/2021 de la Comisión Europea), un instrumento clave de financiación comunitaria para promover el crecimiento, el empleo y la competitividad mediante inversiones en infraestructuras específicas a escala europea.
En España, la falta de la infraestructura para el tren con el ancho europeo (pasando de 1.688 mm a 1.435 con una doble plataforma para dos vías en cada sentido) afecta al 50% de la población, al 60% del tráfico de mercancías portuarias y a más del 45% del PIB, tal como recordó Vicente Boluda, en el acto celebrado en Barcelona. De la mano de periodista Maribel Vilaplana conductora del acto, los técnicos ferroviarios de AVE, Xavier Lluch y Francisco García Calvo, revisaron el estado actual de las obras.
El 85% de la extensión del Corredor Mediterráneo tiene proyecto de obra asignado y se está trabajando intensamente en el 74% del trazado. En Catalunya: la Llagosta, la Sagrera y el nudo de Castellbisbal–Vila-seca; en la Comunitat Valenciana, el cambio de ancho entre Castelló y Vandellòs, los accesos al puerto de Castelló y de Sagunt, la terminal de Font de Sant Lluís y los trabajos en La Encina. En la región de Murcia, la línea de alta velocidad, el acceso al puerto de Escombreras o la línea de alta velocidad a Cartagena. Y en Andalucía, el tramo Almería-Murcia, el de Bobadilla a Algeciras y la autopista ferroviaria desde el puerto de Algeciras.
Todo ello, ¿es suficiente? Los empresarios dicen que no. Hay zonas aún con especiales dificultades, sobre todo en Murcia y Andalucía. En Catalunya las obras están más avanzadas, pero falta mejorar los accesos a polígonos industriales y puertos, y está en duda la capacidad del Corredor para absorber todas las necesidades cuando estén en pleno funcionamiento los tramos con mayor concentración de tráfico.
El encuentro empresarial #QuieroCorredor nos recuerda que apostar por el Mediterráneo es apostar por el conjunto del país, por conectar territorios. Es una urgencia de toda Europa para mejor unir culturas, mercancías y personas.